Las vacunas: historia y actualidad

No cabe duda que las vacunas, con sus más de 200 años de existencia, son una de las tecnologías médicas que más vidas han salvado, evitando que millones de individuos sufrieran la acometida de múltiples enfermedades. La liberación de la lacra que suponen hoy en día otras enfermedades, que siguen costando millones de vidas, por ejemplo el paludismo, también pasa por evitar su aparición a través de la producción de vacunas, y en ello trabajan miles de científicos.

Por ello las vacunas han sido vistas como una de las mayores conquistas de la humanidad, un elemento beneficioso y de progreso en el que lo único que debía conseguirse era que las administraciones pusiesen medios para su aplicación y que la población aceptase someterse a su extensión, eliminando así todo obstáculo para la lucha contra las enfermedades. Por tanto, muchas veces la historiografía sobre las vacunas ha sido un relato lineal que debía terminar con el triunfo de un elemento tan beneficioso que no era conectado con otros factores del contexto donde se aplicaba. 

Sin embargo, en las últimas décadas el fenómeno que han supuesto las vacunas ha comenzado a ser analizado con muchos más matices y a prestar mucha más atención a como esta tecnología médica se ha articulado en diversos contextos para la consecución de diversos fines, más allá de su objetivo de prevención de la enfermedad. Las vacunas se han utlizado para fundamentar identidades profesionales, para dirimir conflictos políticos, para articular movimientos de contestación por parte de la población, para obtener beneficions económicos, por citar algunos de los usos que se les ha dado, más allá de la evitación de la enfermedad.

Los capítulos que conforman este volumen se inscriben en esta tradición de uso de las vacunas como elemento de legitimación de divesos intereses. Los estudios aquí publicados sobre la lucha contra la viruela, la gripe o la polio, en diferentes contextos, nos permiten ver como ese fin preventivo se entremezcló con otros intereses. Visto de este modo el fenómeno que supone las vacunas resulta mucho más rico y polifacético, y permite que lo juzguemos desde puntos de vista que van mucho más allá de un hecho, sin duda, muy beneficioso para la humanidad.